ENTRE LOS MAS POBRES
DE LOS POBRES
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NO HAY MAYOR ERROR QUE NO HACER NADA POR PENSAR QUE SE HACE POCO O QUE NO SOMOS CAPACES. El 19 de marzo de 1949, cuando la Madre Teresa comenzaba su labor en Calcuta, una joven se le acercó "Quiero trabajar contigo". La Madre le dijo "Va a ser duro". La joven le respondió "Lo sé. Estoy preparada". Y se quedó con la Madre. Agnes fue la primera voluntaria de las Misioneras de la Caridad, a lo largo de estos más de cincuenta años, han sido miles los que se han acercado al calor de las Misioneras de la Caridad para colaborar con sus actividades en todo el mundo. LOS COLABORADORES DE LAS MISIONERAS DE LA CARIDAD La Madre quiso organizar desde el principio para la oración y el trabajo a aquellos que contribuían con dinero, alimento, medicamentos y con su propio trabajo a la labor de las Misioneras con los pobres. La Madre siempre vio en los colaboradores un grato medio para difundir su mensaje de amor a Dios. Desde Calcuta la red de colaboradores se fue extendiendo por todo el mundo. Hoy son muchos los que se han acercado de todas las partes del mundo y se han sentido parte de esa labor de amoroso servicio a Dios en las personas de los necesitados. La Madre se refería a ellos con estas palabras "Ruego por vosotros a fin de que podáis crecer a semejanza de Cristo, que podáis ser verdaderos portadores del amor de Dios y que en verdad manifestéis Su presencia primero en el seno de vuestra propia familia y luego en casa de vuestro vecino más inmediato, en vuestra calle, en vuestra ciudad, en vuestro país y sólo entonces en todo el mundo, vivo ejemplo de la presencia de Dios". Y así es, Calcuta es la ciudad del voluntariado. Cualquiera puede llegar a Calcuta, desde el primer momento pasa a formar parte de una gran familia, la de los voluntarios. Una familia que se renueva a diario, crece y disminuye según la época, pero siempre tiene hermanos mayores y recién llegados, que enseguida se harán hermanos mayores. Siempre hay una bienvenida, una despedida, un cumpleaños o algo que celebrar… la amistad surge espontanea y los amigos lo serán para toda la vida. Cada uno llega con su propia historia, solidaridad, turismo alternativo, nuevas experiencias, pasaba por aquí…. Todos se marchan con una historia común. ENFERMOS Y SUFRIENTES DE LAS MISIONERAS DE LA CARIDAD La Madre tenía una gran confianza en la oración y el sufrimiento ofrecidos a Dios. Desde el principio quiso que cada una de las Misioneras y ella misma estuvieran vinculadas a una persona enferma o sufriente. "encargadas" de velar delante de Dios por su santidad y apostolado. HAGAMOS ALGO HERMOSO POR DIOS La Madre Teresa gustaba de explicar el objeto y fin de su labor "la llamada de Dios a servirle en los más pobres entre los pobres". "No estamos aquí por el trabajo en sí, sino por Jesús. Somos religiosas y no asistentas sociales, ni enfermeras, ni maestras, que somos Misioneras religiosas. Todo lo que hacemos, nuestra oración, nuestra labor, nuestro sufrimiento, es para Jesús… El me da fuerzas. Le amo en los pobres, y amo a los pobre en Él. Sin Jesús, nuestra vida no tendría significado alguno, sería incomprensible… Lo hacemos por Jesús". No hay mayor error que no hacer nada por pensar que se hace poco, y al llegar, aunque uno se sabe nada, se siente un trocito de un mecanismo formado por millones de trocitos. La filosofía de las misioneras de la caridad, de abandono total en la providencia, cuenta con los colaboradores para realizar su labor. La estructura permanente de las casas es mínima, y en su funcionamiento POR TODO EL MUNDO Desde que en 1963 comenzará la expansión de la labor de las Misioneras de la Caridad esta no se ha detenido en ningún momento. En la India (Calcuta, Ranchi, Jhansi, Delhi y Bombay) y desde la India su labor se extendió por todo el mundo: Australia, Jordania, Gaza, Yemen del Norte, Etiopía, Tanzania, Filipinas, Nueva Guinea, Bélgica, Alemania, Holanda, Estados Unidos, Colombia, Perú, Fidji, Papúa… En estos momentos existen más de 600 casas en ciento treintaseis países. - ORACIONES DE LAS MISIONERAS DE LA CARIDAD - EL CARISMA DE LAS MISIONERAS DE LA CARIDAD
-"SAL
DE TU TIERRA" P.Rainiero Cantalamessa LA MADRE TERESA No vamos a descubrir nada sobre este personaje menudo, que conquistó el mundo con su sonrisa. Nunca se atribuyó ningún mérito "Yo no hago nada, es El quien lo hace. Yo sólo soy un instrumento en Su mano. Estoy más seguro de esto que de mi propia existencia". Y de el obtenía su fuerza, una vez la Madre Teresa bromeaba "Dios me ha hecho un gran regalo, me ha dado una constitución robusta", necesaria para poder realizar esa realidad increible, impresionante a través de la oración y el trabajo, el trabajo y la oración, y los continuos viajes para extender su labor por todo el mundo. La Madre Teresa es toda una personalidad del Siglo XX, ni buscó ni evitó la fama, la utilizó para gloria de Dios. El Premio Nobel de la Paz, el Kennedy en los Estados Unidos, el Bharat Ratna en la India…que hacia que algunos como el Secretario General de la ONU la presentara como "la mujer más poderosa del mundo" y así lo demostró ante las mismas Naciones Unidas en su 40 Aniversario, "Ha sido maravilloso. Los he hecho rezar en esa sala donde nunca se había rezado. Les he dicho "Esta organización se estableció para promover la paz en el mundo. Recemos a Dios, el único que nos puede dar la paz". Y les dirigí en el recitado de la plegaria de san Francisco de Asís: "Señor, haz de mí un instrumento de tu paz". Un poder que utilizaba siempre en nombre de los pobres y en su beneficio, así no desaprovechaba ocasión y, por ejemplo, en una entrevista con un periódico japonés no dudo en afirmar "Señor Kato, usted que escribe tan bien, escriba por favor en su periódico: "La Madre Teresa necesita una casa, una bonita casa". Los japoneses son ricos. La persona que tenga dos casas puede darme una". Los medios de comunicación hicieron posible difundir por todo el mundo el mensaje de la Madre Teresa, "Dios es Amor. Dios ha creado a todos los hombres y mujeres por amor, y sigue amándolos. Por ello, debemos amar a Dios y amarnos los unos a los otros igual que Dios nos ama. Al término de la vida seremos juzgados por el amor, de acuerdo con el amor que hayamos mostrado y practicado con los demás hombres y mujeres". Amor, Respeto a la Vida, Paz… y para todo eso oración, la Madre, en consecuencia, invitó a todo el mundo a alcanzar la santidad, que no está reservada a unas pocas personas religiosas, sino abierta a todos, sea cual fuere su vocación en la vida. La Madre aconsejaba que cada uno fuera perfecto en su rango, su posición, su ocupación, en cualquier oficio que desempeñase. Sabía que cada uno de nosotros tiene una función distinta en el mundo, que Dios nos otorga diferentes dones adecuado a nuestra posición en la sociedad. UN ANCLA EN LAS AGUAS TURBULENTAS Así describía E. Le Joly, biografo y amigo personal de la Madre Teresa, el papel que esta representaba para el mundo. El mensaje de la Madre Teresa atrae a todos, independientemente de que crean o no en Dios. Los no creyentes y los pocos dados a la plegaria pueden abrir el corazón y reflexionar acerca de lo bueno y lo malo. Eso acabará por llevarles a amar a su prójimo. Breve Biografia de la Madre Teresa de Calcuta RELACIÓN
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